El Dr. Vicente Plaza desarrolla en este artículo las particularidades del asma en adolescentes y la baja adherencia al tratamiento en los más jóvenes.
Por múltiples motivos, la adolescencia es una etapa crucial en la vida de las personas y también en el asma. Frecuentemente, coincidiendo con ella, muchos niños asmáticos dejan de presentar síntomas de la enfermedad, como si se hubiesen “curado”. Lamentablemente, alguno de ellos volverá a padecerla en la vida adulta.
El asma en la adolescencia puede tener alguna connotación diferencial que hace que sea necesario tener presente algunas de sus características.
En primer lugar, porque con frecuencia cursa con disnea durante el esfuerzo físico, lo que se ha venido a denominar asma de esfuerzo o asma inducida por el ejercicio físico. Ello condiciona de manera importante la calidad de vida de los chicos afectados, limitando su práctica deportiva en un momento en que, además, dicha actividad desempeña un papel clave en las relaciones interpersonales y en el adecuado desarrollo psicofísico de la persona.
Puede relegar a los afectados a la inactividad, incluso en alguna ocasión a la exclusión (y escarnio) de sus compañeros y supuestos amigos.